viernes, 26 de septiembre de 2008

La Caza del Snark

El bravo Capitán del mar había adquirido
un gran mapa sin nombre ni vestigio de tierra;
y la tripulación, viendo el mapa vacío,
en blanco, inteligible, se mostró satisfecha

"Trópios, Meridianos, Polo Norte, Ecuador
y Zonas de Mercator, ¿qué son, vamos decidme?"
y la tripulación, unánime, admitió:
"¡signos convencionales que para nada sirven!

"Tanto mapa ilegible, con sus islas y cabos.
A nuestro Capitán invito agradezcamos
(así exclamaban todos), por habernos comprado
el mejor, el perfecto, ¡el mapa inmaculado!"


La Caza del Snark de Lewis Carroll
II - El Discurso del Capitán (extracto)

lunes, 22 de septiembre de 2008

Errands by kris-wilson

http://kris-wilson.deviantart.com/

sábado, 20 de septiembre de 2008

Nirvana

El 10 de diciembre de 1996, una neurocientífica de Harvard llamada Jill Bolte Taylor despertó en su apartamento con un dolor agudo detrás de un ojo. Un vaso sanguíneo se había reventado en su cerebro. En cuestión de minutos el lóbulo izquierdo comenzó a fallarle. Extrañamente se sentía estupenda. “Me sentía como un genio liberado de su botella”, escribió más tarde.
Había desaparecido el parloteo incesante que normalmente llenaba su mente. Sus preocupaciones cotidianas -sobre su hermano esquizofrénico y su empleo importante- deshicieron sus amarres y se alejaron de ella.
También cambiaron sus percepciones. Podía ver que los átomos y las moléculas que conformaban su cuerpo se mezclaban con el espacio a su alrededor. “Mi percepción de los límites físicos ya no estaba limitada a donde mi piel se encontraba con el aire” escribió en su biografía.
Mientras tanto su cuerpo luchaba por sobrevivir. Tenía un coágulo del tamaño de una pelota de golf en su cabeza, y sin el uso de su hemisferio izquierdo perdió las funciones analíticas básica, como la capacidad de hablar o entender números y letras.
A Taylor le ayudó que su hemisferio izquierdo no quedó destruido, y eso probablemente explica cómo fue capaz de recuperarse por completo.
Ella vivió algo que había estudiado durante mucho tiempo: que los dos lóbulos del cerebro son muy diferentes. Por lo general el izquierdo nos da el contexto, el yo interior, el tiempo y la lógica. El derecho nos da la creatividad y la empatía.
Muchos budistas se han acercado a Taylor, pues dicen que su experiencia confirma las creencias en un estado de alegría alcanzable.
“La religión es una historia que el cerebro izquierdo le cuenta al derecho” dice Taylor. Aún así, afirma que: “El nirvana ya existe”.

Diario The New York Times - Sábado 21 de junio de 2008

Algo es seguro

Para algunas personas la incertidumbre del día a día es insoportable. A ellas les digo que deberíamos sentirnos afortunados por saber al menos cómo termina todo...

Ya vendrá, ya vendrá
combatí la ansiedad
que la muerte llegará
y con ella la paz

martes, 9 de septiembre de 2008

lunes, 8 de septiembre de 2008

¿Cuál es el mejor antídoto contra la pastilla roja?

El tema es que un poco por mi formación profesional y otro poco por una predisposición natural a pensar demasiado, terminé viendo al mundo como una sucesión de hechos sin ninguna direccionalidad en un universo prácticamente infinito y en un tiempo prácticamente ilimitado. En tales condiciones mi vida se reduce a una búsqueda constante de motivaciones para continuar en el camino, estando casi convencido de que no voy a llegar a ningún lado. Ya sea porque no existe ningún lado, o porque pienso que voy a ser incapaz de encontrar la forma de alcanzarlo.
Por lo que conozco, la solución a estos problemas existenciales sería un camino individual al final del cual uno podría encontrar, en el mejor de los casos, una respuesta que lo satisfaga únicamente a uno mismo. Pero la verdad es que no me parece que valga la pena dedicar tanto tiempo y esfuerzo a un emprendimiento que lo único que te puede brindar es la satisfacción de la tranquilidad personal. A lo sumo, podría dedicarme a encontrar una respuesta que satisfaga al mayor número posible de personas. Sin embargo, pienso que esto ya ha sido realizado en el pasado por personas como Aristóteles, Jesús, Buda, Mahoma, Darwin, etc. Tanto las religiones como la ciencia son saberes populares, cuya principal función es darle un sentido a tu existencia. De acuerdo con esta línea de pensamiento, lo más sensato sería que me dedique a la ciencia, que es paradójicamente a lo hago y lo que me trajo aquí desde un principio… :P

De todas formas, existe otra solución a estos problemas, tan simple como no pensar en ellos. De hecho, considero que la mayor parte de la gente no llega siquiera a vislumbrarlos, quizás porque adopta sin demasiados reparos las concepciones de la religión y/o la ciencia para guiar su ida. El tema es que una vez que se comienza a pensar en esto es muy difícil salir más o menos airoso. Sin embargo, afortunadamente hoy en día existen muchos (quizás demasiados) métodos para no pensar:
1) El clásico es formar una pareja y dejar que el amor y/o sexo nublen tu pensamiento, es un método antiguo pero muy efectivo. La contra es que creo que su efectividad disminuye con el tiempo debido a un fenómeno de acostumbramiento:(. Por esto es que se hace necesaria la búsqueda de nuevas parejas y/o experiencias, lo cual conlleva sus propios problemas…
2) El segundo es uno muy bien visto socialmente, al menos fuera del país, la devoción al trabajo. Es en cierta forma una manera personal de justificar tu existencia, alternativa a la religión y la ciencia.
3) Tenemos también a los más modernos medios de comunicación y entretenimiento (diarios-televisión-radio y libros-historietas-cine-videojuegos-Youtube, respectivamente), que con su catarata de información prácticamente colapsan nuestra red neuronal impidiendo, en el mejor de los casos momentáneamente, una reflexión profunda.
4) Finalmente, hay que mencionar a los diversos tipos de drogas (legales o no). Es quizás el método que menos dedicación requiere por parte del usuario, pero sus resultados son dispares y se encuentran siempre afectados por el fenómeno de acostumbramiento, que disminuye su efectividad con el correr del tiempo.

La cosa es que la vida es un quilombo, y lo mejor para la salud parece ser saber lo menos posible sobre el tema.

19/4/2008

jueves, 4 de septiembre de 2008

Ryomou


Hamilton Court

Cuando lo abrasador del verano golpeó a Gurgaon, una metrópoli al norte de India, y el suministro municipal de agua funcionaba sólo unas cuantas horas al día, en el interior de un rascacielos llamado Hamilton Court, Jaya Chand podía abrir la llave de su cocina en cualquier momento y obtener agua a raudales. Lo mismo ocurría cuando se iba la luz en la ciudad, durante 12 horas al día. La pantalla plana de los Chand resplandecía. Hamilton Court –con todo y escuela privada dentro de sus confines, césped cuidado y guardias de seguridad- es sólo una de las exclusivas comunidades amuralladas que han florecido por toda India durante los últimos años. “Es una especie de isla autocontenida”, describe Ashish Chand, esposo de Jaya. “Las cosas han mejorado para la clase afortunada”, dijo Jaya Chand mientras preparaba la comida con una vista panorámica de Chakkarpur, barriada donde vive una de sus dos empleadas domésticas, Shefali Das. Enfrente de la torre, los hijos de Das se bañan todos los días con baldes de agua fría.
The New York Times , 14/6/2008